Luisa Vázquez Méndez, se encuentra laborando actualmente en dos instituciones de Salud en la entidad. En la Secretaria de Salud y en el Hospital General del ISSSTE Tlaxcala.
Fue nuestra alumna y en entrevista nos cuenta cómo fueron sus días como alumna y egresada de las primeras generaciones de la Escuela de Enfermería Florencia Nightingale.
“Yo egresé hace 34 años. Fui la 4ta generación de enfermería, me tocaron todavía las instalaciones anteriores que estaban en la calle 23. Estaba en un grupo de jóvenes, puras mujeres, más o menos de la misma edad entre 15 y 18 años.
En sus memorias menciona que llegar a la institución la formó no solamente en el ámbito profesional, sino que también como persona.
Fue una etapa muy bonita. Recuerdo que tuve que madurar muy rápido, porque todas llegamos a ver qué implicaba estudiar enfermería y el poder estudiar ahí era tener cambios. Me encantó.
¿Cómo llegó a la escuela?
“Yo me enteré por vecinos, aparte yo estudiaba por ahí cerca en la Loma Xicohtencatl y pues veía a varias chicas con el uniforme y empecé a preguntar por él. Me dijeron que era el de una escuela de enfermería. Me empezó a llamar la atención y todo, así que hablé con mis papás y ya decidí entra ahí”.
Un gusto por el uniforme que se convirtió un gusto por la carrera.
“Me encantaba verlas porque era una falda café, zapatos cafés boleaditos, su moñito; todo eso me llamo la atención. El cabello así bien cortito, después fuimos a ver y dije yo quiero estudiar aquí”.
A lo largo del camino recorrido, en la institución, para formarse profesionalmente, Luisa se llevó varias enseñanzas y valores al momento de egresar.
“Una de ellas fue la responsabilidad, ser responsable en todos los sentidos. Entregar el trabajo puntualmente y bien hecho. Aparte del respeto, también la honestidad y el profesionalismo. Debíamos ser mejores, no quedarnos solo con lo que los maestros nos decían si no buscar ser mejores”.
Valores que se ven reflejado de igual forma en sus colegas, con los que ha compartido profesionalmente espacio de trabajo.
“Me he encontrado a algunas compañeras en las instituciones en las que me he desempeñado. Y tenemos la misma visión sobre cómo nos educaron: Ser humanistas y profesionales. Hablamos el mismo idioma”.
También destacó que los jóvenes próximos a egresar al momento de empezar a laborar deben tener en mente estos valores. “Más que nada es tener sentido humano, la honestidad, la responsabilidad y ante todo ser profesional”, dijo.
Pero trasladándolo a lo largo de su carrera profesional, nos cuenta cómo es que ella aplica estos valores al ser Coordinadora de un área terapéutica.
“Lo que inculco es trabajar siempre en equipo, ser honestos, ser responsables. Lo reitero porque muchas veces, se da eso de que no queremos trabajar en equipo; pero yo creo que en el ámbito en que nos desempeñamos que es sector salud, no se puede trabajar solo, porque no sabemos si el paciente se nos pone grave y por no hablarle a la compañera se me pueda morir. No son papeles para desecharlos, son vidas”.
“Entonces eso es lo que yo inculco siempre trabajar en equipo y siempre mantenernos a la vanguardia, seguir preparándonos más, seguir estudiando ante las nuevas enfermedades que se presenten, siempre mantenernos en la vanguardia”
La cofia más que parte material del uniforme, es el símbolo de las enfermeras.
“Cuando tuve imposición de cofia hace unos ayeres, fue algo maravilloso. Cuando nos ponían la cofia y la capa, lo recuerdo como una ceremonia que se valoraba porque uno en ese momento decía por dentro: ‘ya soy enfermera’. Y me tocó vivirlo de las dos partes: Que a mí me pusieran y yo también poner cofias”.
¿Cómo egresada que es lo que reconoce de propositivo en el nuevo plan de estudios de la EEFN?
“Bueno es un plan de estudio muy bueno que se ha mantenido a la vanguardia. Van viendo las necesidades de la sociedad para implementar las materias; ósea de las que tuve en aquel momento, han incrementado más pues ya tienen más temas prácticos, tienen más equipo y tienen laboratorios de propedéutica. Antes practicábamos entre nosotros de manera empírica, nos daban la práctica muy, muy diferente. Ahora pues ya tienen muchos beneficios para los estudiantes, con más materias, más talleres, laboratorios”.
Por último, compartió un mensaje a la comunidad estudiantil alrededor de nuestros 34 años.
“Ante todo felicitar a todos los directivos de la institución porque mantener una escuela con 34 años, la verdad mis respetos; y creo que se han mantenido fortalecidos. Tal es así que ya es un espacio muy unido y siempre pensando en la comunidad, en forjar profesionales que tengan sentido humano alto; y ante todo, que puedan servir a la sociedad de Tlaxcala. Entonces muchas felicidades a la EEFN. Les deseo que esto se siga manteniendo, que sigan a la vanguardia”.
También, dejó un consejo a todos aquellos jóvenes aspirantes que quieran estudiar enfermería.
A los estudiantes, les diría que se tienen que seguir preparando. No por el hecho que en la escuela les dan la información, las materias y todo pueden quedarse con eso, deben seguir investigando. Hay que mantenerse a la vanguardia y ante todo no quitarle valor al ser humano. Sobre todo ver si me gusta la carrera, seguir. Hay muchos estudiantes que están estudiando nada más porque los obligaron, por algún compromiso, pero no les gusta la carrera. Entonces ¿qué puede esperar la sociedad? Que esos enfermeros maltraten a los pacientes. Por eso, hay que revisar sus intereses.
A los que apenas están interesados en entrar a la escuela, pues bien, los invito a darse la oportunidad de poder estudiar la carrera de Enfermería. Yo estoy enamorada de mi carrera, me encanta, me gusta ayudar a la gente. Entonces eso creo que es Enfermería. Pero si no nos gusta ayudar a las personas, estamos equivocados de carrera, sería mejor estudiar otra cosa.
Y para cerrar la charla, en esa invitación a estudiar Enfermería, comparte las satisfacciones que le ha dejado en su vida personal y profesional.
“Llevo ya ejerciendo la carrera 17 años. Me ha dado mucho tanto lo personal como lo profesional. Me he seguido preparando, me ha dado la oportunidad de tener una familia y vivir ahora sí como con algunos privilegios; y lo que me ha dejado muy marcado de mis profesores, ahí en la escuela, hablo de la profesora Georgina Banderas, la directora, que cuando éramos estudiantes nos dijo: ‘Ustedes deben ser mejores, no deben ser del montón y deben buscar otras alternativas siempre de superarse’. Entonces eso me lo dejo bien inculcado, es algo muy cierto. Yo tengo que seguir creciendo, tengo que buscar y entonces me he mantenido a la vanguardia.
Repito me gusta mi carrera y bueno pues hay que seguir ejerciendo mientras podamos”.